15.3. México y la masonería racista
Al finalizar la Revolución Mexicana, el gobierno se propuso establecer un nuevo orden social en el que, impulsado por las bases teóricas de los ideólogos de la raza europeos, la cuestión de la raza era el elemento clave. Se impulsó un proyecto de mestizaje que era profundamente racista, ya que eimplicaba la desaparición de los pueblos y culturas indígenas, en una especie de depuración racial e higine mental. En este proyecto se combinaban el vasconcelismo, el positivismo, la masonería y la etnografía radical.
''La Revolución fue un parteaguas que obligó al nuevo Estado a replantear los términos del orden social. Para hacerlo conjugaron los antecedentes que sobre razas existían desde finales del siglo XIX con las nuevas corrientes de pensamiento existentes en Europa sobre eugenesia y razas". Beatriz Urías Horcasitas.
La profesora Beatriz Urías, que ha estudiado este hecho, afirma como la política racista auspiciado por José Vascocelos pretendía eliminar aquellos elementos insociables del país.
''La mejor manera de frenar las manifestaciones de insociabilidad y asociabilidad era, justamente, crear una nueva raza, depurar, con nuevas potencialidades, como quería José Vasconcelos. Pensaban que así no habría alcohólicos, no habría toxicómanos ni criminales. Como lo digo al principio del libro, era un proyecto utópico, irrealizable, pero ideológicamente fortaleció al Estado posrevolucionario. Ese es el centro del problema, que fue un proyecto constitutivo del Estado posrevolucionario".
El antropólogo Manuel Gamio (1883-1960) realizó una propuesta indigenista de mestizaje vinculada a la eugenesia que se estaba fraguando en Europa y los Estados Unidos. Precisamente fue Manuel Gamio quien representó a México en el primer Congreso Internacional de Eugenesia. El economista Gilberto Loyo (1901-1973) fue el encargado de llevar a la práctica todas estas ideas. Miembro del gobierno del Partido Revolucionario Institucional (PRI) impulsó una serie de medidas de resprinción de la migración para únicamente fueran las razas blancas las que enriquecrieran el bagaje genético de la población mexicana.
El doctor Alfredo Saavedra fundó la Sociedad Mexicana de Eugenesia. Propuso la creación de una raza mestiza mejorada, eliminando las comunidades chinas del país y uniformando las diferentes etnias indígenas.
“… se ha llegado a la conclusión de que el progreso de un pueblo depende fundamentalmente de su constitución etnológica, y de modo secundario de las cuestiones geográfico-ambientales y educativas.
[…] un pueblo deficientemente constituido, desde el punto de vista de su salud hereditaria, es un conglomerado del que poco se puede esperar; es natural deducir que la realización humana en el campo de trabajo y de la idea, dependen de su mejor dotación hereditaria, ya que las lesiones que se reciben de los antepasados son taras que modifican radicalmente la conducta del hombre. Estudios a través de la composición etnográfica, estudios hechos en el campo del mestizaje, estudios realizados en los pueblos que marchan hacia la decadencia, nos señalan la posibilidad de mejorar a las razas que han heredado múltiples estigmas, capaces de hacerlos desaparecer o de responder con reacciones negativas al imperativo de uan vida social normal.
Es por esto, por lo que nos preocupamos grandemente de la futura constitución racial de nuestra nacionalidad llamada a homogeneizarse a través de una mezcla adecuada, que le permita desarrollarse en mejores condiciones, se la libera no sólo de una herencia defectuosa que la hace fácil presa de enfermedades, de choques psicológicos insanos, de perversiones en la conducta sexual”. Alfredo Saavedra.